El camino para ingresar a México no es fácil para las personas que vienen de otros países como Venezuela, Colombia, Ecuador, entre otros que buscan llegar hasta Estados Unidos, para lograr el tan anhelado “sueño americano”.
El venezolano José Luis Rodríguez Padilla, relató, “el primer inconveniente que uno tiene es desde que adquieres un ticket, los de la central de autobuses te dicen que el costo es de 2 mil 200 pesos por persona y al decirle soy migrante te o te escuchan el acento, te aumentan el costo hasta los 3 mil 200 pesos y te marcan en la parte trasera del boleto, con la palabra inmigrante, ya tu vas marcado, para lo que viene”.
“Segundo, al menos en mi caso, no puedes montar cualquier autobús, te tienen uno específicamente uno para nosotros, que pasa en ese autobús, todo inicia desde que tomas la carretera, migración jamás te para solo hasta que llegas a Ciudad Juárez, tu vas rodando y de repente el autobusero tira cambio de luces, baja la velocidad y se monta un policía y te dice quiero 500 por persona y bajan a los mexicanos para evitar tropiezos con ellos”, agregó Rodríguez Padilla.
El venezolano añadió “pasando una hora de trayecto, se repite la misma historia, pero en vez de 500, te piden mil pesos por cada persona, bajan a los mexicanos, mientras a nosotros nos quitan los celulares y los avientan al monte para forzarnos a entregarle la plata, se da el matraqueo”.
“Después los autobuseros unas ciudades antes de llegar a Juárez, justo en Durango te venden al famoso grupo armado de encapuchados, los que controlan las carreteras, no portan identificación solo el rostro cubierto y portan armas, se para un carro particular, descienden y alejan a los mexicanos, si dices que no traes plata, empiezan a revisarte, y se quedan con lo que te quitan, eres robado y parte de todo lo que pasamos es por los autobuseros”, detalló el venezolano.
Rodríguez Padilla resaltó que desde la Ciudad de México hasta Juárez, son fácil tres retenes en donde pagas 3 mil 500 y es posible que quedemos en algún lugar del trayecto sin vida y se molestan por no cubrir los pagos que nos exigen.
A pesar de la experiencia, deciden no denunciar ante alguna autoridad, ya que consideran que no prosperará la querella, aparte que el temor de ser ubicados al llegar a Ciudad Juárez se los impide.
Lamentablemente la mayoría de los migrantes cuentan con alguna experiencia que ellos consideran como mala, que los ha hecho decidir quedarse en esta ciudad, mientras logran hacer el trámite por medio de la aplicación que ha dispuesto el Gobierno Estadounidense.
Publicado originalmente en El Heraldo de Juárez