Juarenses temen que se vuelvan a registrar ataques a los ciudadanos tras la fuga de varios reos del Centro Estatal de Reinserción Social (CERESO) 3, tal como ocurrió el denominado “jueves negro” el 11 de agosto de año que concluyó.
En un recorrido ciudadanos se muestran preocupados porque este primero de enero, se estén registrando hechos violentos en donde queda de manifiesto que los juarenses están expuestos y las autoridades rebasadas.
“Se siente un terror tan grande, nosotros los ciudadanos de bien no queremos que se vuelva a los ataques de hace poco, agosto fue cuando pasaron, es triste ver la ciudad así, esperamos no nos toque un balazo”, comentó Rafael, mientras daba alimento a las palomas en un parque de la ciudad.
“Pues siento mucho miedo, no sabemos como reaccionar ante hechos como los que se registran este domingo y como los ocurridos el 11 de agosto, es increíble que las autoridades no puedan tener un mejor control y que desde el gobierno a ya en México, no ayuden a esta ciudad”, mencionó la señora Domínguez, quien por temor no proporcionó su nombre.
Las reacciones anteriores se emitieron después de conocer que aparentemente 30 internos del CERESO 3, escaparon después de generar un motín en el centro penitenciario y una balacera sobre la avenida Ejército Nacional y avenida Gómez Morín.
Desde las primeras horas de este domingo primero de enero, se registró un motín al interior del CERESO 3 y se aprovecho para que varios de los internos pudieran escapar, dejando a dos custodios sin vida.
En la escasa información que se logró obtener, trascendió que un grupo de internos lograron apoderarse del armamento para luego someter a los custodios y darse a la fuga, mientras que otro grupo de reclusos continuaron generando disturbios.
La movilización de policías continua al exterior del CERESO 3, ya que a aparentemente los internos están quemando cobijas entre otros objetos; se desconoce hasta el momento si otros internos están lesionados o sin vida, solo se escuchan algunos gritos y detonaciones por arma de fuego.
Al exterior del centro penitenciario se puede observar a familiares de los internos, estos piden sean informados de la situación real de lo que sucede; se espera que las autoridades emitan información oficial.