La mañana del martes comenzaron a ser velados los restos de Ernesto Alfredo Piñón de la Cruz, “El Neto”, en las capillas de la funeraria Perches, de las avenidas Ignacio de la Peña y 5 de mayo.
Al exterior del lugar se pudo observar una fuerte vigilancia de personal militar que resguardan estas capillas, por seguridad de los familiares de “El Neto” y empleados de la negociación.
Incluso, los castrenses se encontraban en las esquinas aledañas de las capillas vigilando en todo momento el perímetro, portando sus armas largas.
Se dijo que está vigilancia fue solicitada por la misma familia de “El Neto”, para poder velar sus restos de forma segura, ante el temor de que pudiera presentarse algún ataque.
Incluso, hasta la noche del lunes, empleados de la funeraria Perches se habían negado a dar información sobre el funeral de “El Neto”, a pesar de que fueron ellos quienes recogieron el cuerpo de las instalaciones del Servicio Médico Forense.
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Todo se manejó con absoluta discreción, a petición de la misma familia de el líder de “Los Mexicles”, según lo dieron a conocer los trabajadores de Perches.
“El Neto” se escapó junto con otros 29 internos del Centro de Reinserción Social Estatal No. 3 el pasado domingo 1 de enero, tras un ataque orquestado desde el exterior.
Cuatro días después fue abatido por las autoridades en las avenidas Carlos Amaya y Cartagena, tras un intenso operativo encabezado por la Fiscalía General del Estado para dar con su captura.
Publicada originalmente en El Heraldo de Juárez