Para la chihuahuense Graciela Ortiz González, secretaria de Operación Política del CEN del PRI, enfrentar como mujer todos los obstáculos en la política que “se puedan imaginar y el deseo de muchos para hacerte retroceder”, la hizo reflexionar y actuar en que toda mujer que aspire asumir responsabilidades estatales y nacionales dependerá de su preparación, convicción y vocación por el servicio público y por la política.
Aseguró que el paradigma de la igualdad en México llegó para quedarse y tan llegó que -enfatizó- una mujer puede transformar naciones enteras, al grado de que hoy existen condiciones para que una mujer llegue a la Presidencia de la República y a la gubernatura de Chihuahua.
Para Graciela Ortiz, “Chela” Ortiz como la conocen sus amigos, ahora la sociedad debe elegir a los gobernantes que estén mejor capacitados y preparados, sin importar el sexo, a aquéllos que tengan una mejor trayectoria y que esté demostrada su capacidad de hacer políticas públicas en beneficio de la ciudadanía.
EH: ¿Cuál ha sido el papel de la mujer en la política mexicana?
GOG: La mujer en términos generales ha hecho una enorme aportación a la humanidad, que empieza a reconocerse a partir del siglo XX cuando se logra que sus derechos y sus exigencias de igualdad sean reconocidos; en este sentido siempre he valorado mucho la visión que tuvo el PRI cuando todavía era un partido prácticamente único en el país, de reconocer esa exigencia de igualdad y de derechos laborales para buscar la equidad en ese sentido y dar reconocimiento del derecho a voto, que fue una de las primeras manifestaciones.
Está fuera de toda duda esa aportación que la mujer ha hecho a la humanidad a lo largo de la vida, sobre todo en el occidente del mundo. En México encontramos expresiones de esa aportación en muchos momentos de la vida nacional, desde las guerras en el siglo XIX, reforma, Revolución Mexicana, y que se empiezan a expresar en las constituciones a partir del reconocimiento del derecho al voto e igualdad salarial en el siglo pasado.
Hay una expresión mundial; en 1995 en la cumbre mundial de Pekín, en la que mujeres tan destacadas como Beatriz Paredes acuden y ante los parlamentos de todo el mundo piden que reconozcan esta exigencia de igualdad. En México el siglo XXI es cuando se expresan esos reconocimientos de los derechos en temas tan importantes como la posibilidad de participar en elecciones en condiciones de paridad y eso me tocó como diputada federal, luego como secretaria de Elecciones del CEN y como senadora impulsar esa igualdad del 50%.
Constitucionalmente hablando, México es de los países más avanzados, pero sin duda alguna la búsqueda del reconocimiento de la igualdad y respeto de la ley, todavía tiene un tramo largo por recorrer.
EH: ¿Qué retos, qué obstáculos ha enfrentado a lo largo de su carrera política?
GOG: Todos los que te puedas imaginar, todos, yo fui en mi estado y en el Comité Nacional pionera en algunas áreas, fui la primera mujer presidente del Comité Directivo Estatal (del PRI), la primera secretaria de Educación y Cultura en Chihuahua, la primera directora de Pensiones (Civiles del Estado), la primera mujer como secretaria de Acción Electoral del CEN del PRI; como entenderás, ha sido un camino en el que se han encontrado obstáculos.
Se han encontrado deseos de hacernos retroceder en el camino que nos trazamos en la política, pero también debo reconocer que mucha de la lucha de la mujer depende desde luego de que se reconozca por la sociedad sus derechos, pero también depende mucho de su persistencia, preparación, convicción y vocación, en este sentido las condiciones establecidas en las leyes, ahí están; parte del reto tiene que ser respondido por las mujeres, pero también por los hombres que deben entender que el paradigma de igualdad llegó para quedarse establecido y tiene que irse respetando.
En el movimiento nacional, la mujer no exige igualdad de derechos, sino respeto a la condición de la mujer que está sufriendo embates que se han ido recrudeciendo a largo del país, sobre todo en estados más poblados del país, y Chihuahua se ha visto vulnerada la seguridad de la vida misma de la mujer, y que han dado como resultado hechos lamentables que no pueden seguirse repitiendo; es un movimiento que busca que las autoridades le den el peso y valor que merecen, la protección del derecho de la mujer, para la igualdad y la protección de su vida misma.
EH: ¿Ha sido difícil ser política en Chihuahua, en México?
GOG: No ha sido sencillo y desde luego no ha sido fácil. Para empezar, para la mujer el tener una actividad, como en mi caso en la política, o en la participación de lo que es su vida profesional y laboral, es doblemente difícil para lo que es para un hombre. La mujer tiene que trabajar, pero también tiene que atender a sus hijos, son labores en las que todavía el hombre no se involucra y siguen siendo tareas específicas para la mujer y eso la obliga a trabajar doble, es una realidad; indudablemente se ha ido evolucionando, el hombre lo encuentras con mayor asunción de sus responsabilidades en la atención de la familia, pero es un fenómeno que tiene una evolución de poco tiempo para acá.
Tienes que sacrificar muchas cosas, sobre todo en el camino de la política, no hay vacaciones, no hay reuniones familiares, siempre la atención de las responsabilidades exige de todo tu tiempo, sobre todo cuando llegas a determinados niveles, y esto también afecta a la familia, pero al final de cuentas decidí que yo no quería ser espectadora de lo que pasaba en mi comunidad y que la mejor manera de buscar el cambio fue a través de la política y a eso he dedicado mi vida.
EH: Ya hay regidoras, diputadas, senadoras, secretarias de Estado, gobernadoras, ¿ya es tiempo de una presidente del país, y caso concreto, de una gobernadora en Chihuahua?
GOG: Yo creo que desde luego las condiciones deben de ser ya para que una mujer asuma o la gubernatura de su estado o la Presidencia de la República, me parece que ya hemos avanzado mucho en ese sentido.
Pero aquí hago una reflexión, ya las mujeres estamos ante la disyuntiva, la población, la sociedad está también, de hacer una elección que corresponda, ya no solamente al género, que por supuesto las mujeres están preparadas, sino en función de las capacidades, de la trayectoria, de lo que cada quien ha hecho por su comunidad; ya no es un tema de género, ya se ha acreditado ante la sociedad que la mujer tiene la capacidad, y en muchas ocasiones superior al hombre de atender responsabilidades públicas.
Lo que tenemos que ver ahora desde la sociedad si un hombre o una mujer garantizan un buen gobierno, una visión que permita que haya desarrollo y crecimiento, una conformación personal, moral, ética, que permita que se lleve a cabo bien la función.
Algo que me llama la atención, en los últimos 15, 20 años, es que las personalidades que se definen por los partidos para atender una responsabilidad de envergadura de una gubernatura, dependen más de la popularidad, del conocimiento de la persona, de si retrata bien o no, si los estrategas políticos los hacen ver más bonitos, si tienen más o menor participación en redes sociales.
Hemos ido descuidando como sociedad, los resultados luego los pagamos, la capacidad de cada quien para gobernar, que no es solamente desear gobernar, gobernar significa tener primero claridad de los problemas del estado, tener primero la capacidad para entender; hablando de mi estado, Chihuahua, lo que significa en el concierto nacional y en el concierto de la industria mundial.
EH: Al ser pionera en algunos puestos de primer nivel, ha ido abriendo camino para las nuevas generaciones, ¿qué mensaje les envía a aquellas mujeres que se preparan y ejercen en la política?
GOG: El primero sería el tener clara su vocación, que tengan una total disposición a llevar a cabo su vocación, las leyes hoy las protegen, hoy les dan lo que no tocó en mis inicios, todas las condiciones jurídicas, pero -insisto- no sólo es el marco jurídico, también debe haber un reconocimiento de la sociedad para que deje a la mujer avanzar, y la mujer por sí misma debe tener un gran impulso propio para lograr lo que su convicción le dicte.
Si una mujer se quiere dedicar a la política, entender que la política no es un camino sencillo ni fácil, ni está puesto para que lleguen las mujeres y lo transitemos, tenemos que hacer lo propio y en ese sentido lo primero es la persistencia en el cumplimiento de tus propósitos; creo que la incorporación de la mujer en la vida política y pública verdaderamente puede transformar la vida nacional y en el estado, estoy convencida de esto.
Una de las grandes lecciones que me ha dado la política es ver la transformación de comunidades a partir de la participación de la mujer, quien impulsa las grandes trasformaciones desde su comunidad hasta la vida de una nación. Ve tu Europa, con Ángela Merkel, cómo se significa la visión de Ángela Merkel que conduce a Europa a un camino de transformación en materia de democracia, de reconocimiento de derechos humanos, impulso y desarrollo económico y eso lo encontramos en muchas partes del mundo, que nos habla de lo importante que es que la mujer esté en el mismo nivel.
*Graciela Ortiz, primera mujer en Chihuahua en encabezar la Secretaría de Educación estatal; primera directora de PCE; primera presidente del CDE del PRI; diputada local, federal y senadora; secretaria de Acción Electoral y secretaria general del CEN del PRI; hoy secretaria de Operación Política del CEN del PRI
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