Llama arzobispo a reconocer la voz de Dios a través de los demás

Todos somos profetas, dijo Constancio Miranda Weckmann

Velvet González | El Heraldo de Chihuahua

  · domingo 4 de julio de 2021

Foto: Pablo Rodríguez | El Heraldo de Chihuahua

En la misa dominical presidida en la Catedral Metropolitana de la ciudad, el arzobispo Constancio Miranda Weckmann, invitó a ser profetas y portadores de la voz de Dios, pues por el sacramento del bautismo, “todos hemos sido constituidos profetas, y Dios nos invita a difundir su mensaje de salvación”, refirió.

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Señaló que en cada uno de los ambientes, hombres y mujeres estamos llamados a prestar su coz a Dios y difundir su mensaje de salvación.

”De acuerdo al Santo Evangelio Según San Marcos, en aquel tiempo Jesús fue a su tierra en compañía de sus discípulos, y vemos que una multitud que lo esperaba le pregunta con asombro de dónde había aprendido a hacer tantas cosas, de dónde venía esa sabiduría para hacer milagros, cuestionaban si no era el hijo del carpintero y María, llenos de incredulidad”.

Foto: Archivo | El Heraldo de Chihuahua

Jesús, entonces, les dijo que todos honraban a un profeta menos al de su tierra.

“El evangelio de hoy nos habla del papel del profeta en la iglesia. En nuestro caminar de la vida de fe, a veces tenemos una imagen distorsionada de lo que es el profeta, pensando en que son personajes extraños que anuncian el futuro que tienen suerte para adivinar, pero no es así. La palabra profeta en la sagrada escritura, significa el que habla en nombre de otro, en este caso, de Dios”, explicó el Arzobispo.

Dijo, “El Señor nos habla de una manera sencilla, y estamos llamados a reconocer la voz de Dios, venga de tal ao cual persona. Debemos derribar todos los textos que nos hemos inventado para no oír esa voz”, puntualizó.

“El evangelio narra que Jesús es rechazado por su gente, no creyeron en sus palabras porque decían era uno más del pueblo, y lo rechazaron porque los invitó a llevar una vida buena, en paz y amar a sus hermanos”.

Explicó que en la actualidad, ocurre lo mismo, cuando un compañero de trabajo, familiar o algún conocido tiene buenos consejos, o hace cosas buenas, y es reconocido por otros que no lo tratan, “y los que estamos cerca no reconocemos sus méritos y desvalorizamos sus cualidades”.

“San Marcos dice hoy en el evangelio, Jesús se extraña de la incredulidad de ellos, y sólo curó a unos cuantos enfermos. Somos un pueblo de profetas, hay que estar convencidos y de ello. No tenemos derecho a decir que no podemos que no estamos preparados, capacitados, no hay excusa que valga, pues nos basta la gracia de Dios al ser bautizados”.

Foto: Pablo Rodríguez | El Heraldo de Chihuahua