¿Quién elige a los gobernantes?

A la pregunta de quiénes eligen a sus gobernantes en Chihuahua, de entrada sería menos de la mitad de la población en edad de votar. En las últimas cuatro elecciones de gobernador se ha reflejado una participación promedio de menos del 50% del listado nominal, a pesar del aumento constante de la población votante. Acaso la contienda que mayor afluencia ha tenido fue en 1998 cuando votó 57.09%.

De acuerdo con datos del Instituto Estatal Electoral (IEE), en los comicios de 2016 la mitad de los votantes no acudió a las urnas, en cambio sí lo hizo el 49.5% de los inscritos en el listado nominal, el más nutrido hasta ahora, al integrarse de 2 millones 634 mil 565 ciudadanos.

No obstante de ese universo, solamente un millón 302 mil 809 personas ejercieron su voto en todo el estado y de ésas, 517 mil 18 eligieron a Javier Corral como gobernante.

Al revisar las cifras de abstencionismo, se aprecia que el factor no es necesariamente proporcional a la cantidad de población, es decir, que entre más grueso sea el listado nominal, mayor sería el porcentaje del no sufragio.

En la contienda de 2016, la ausencia del voto aplicó para Juárez –el más poblado de todos los municipios— donde se alcanzó un abstencionismo de 59.14%, empero también fue elevado en Cuauhtémoc con 56.62%, le siguió Delicias con 50.9%, la capital con 47%, mientras que en los 16 municipios del sur de la entidad fue de 43.18% y en Camargo de 40.69%.

2010, la soledad en las urnas…

Según los registros del IEE, el proceso electoral estatal que menor participación ha tenido fue el desarrollado en 2010, cuando César Duarte triunfó con una votación de 41.41%.

Esto es que un millón 81 mil 887 ciudadanos acudieron a las urnas, de un listado nominal total de 2 millones 612 mil 623 personas y por el candidato priista votaron 600 mil 345 personas.

Sin embargo, el abstencionismo alcanzó la cifra más elevada en la historia democrática del estado con un promedio de 58.59%, la cual por ciudades se reflejó de la siguiente manera: Juárez con 70.41%, Cuauhtémoc con 62.96%, Delicias con 54.82%, Camargo con 51.92%, la capital con 51.28% y la región sur con 31.95%.

2004, grises comicios

En 2004 poco menos de un millón de chihuahuenses (992 mil 342) acudieron a las urnas en la entidad, lo que representó el 44.15% de la lista nominal integrada entonces por 2 millones 247 mil 678 ciudadanos en total.

Con 55.85% de abstencionismo obtuvo la victoria José Reyes Baeza al favorecerle 561 mil 106 sufragios. Por ciudades, la ausencia del cruzado de boletas electorales fue de 63.42% en Juárez, de 50.56% en Chihuahua capital, de 47.83% en Camargo, de 47.22% en los 16 municipios de la zona sur, de 43.2% en Delicias y de 42.10% en Cuauhtémoc.

1998, el parteaguas

Con 57.09% de participación, la elección de gobernador para el periodo 1998-2004 contó con una cantidad considerable de votantes, en la cual salió victorioso Patricio Martínez con 497 mil 25 votos.

Según los datos del IEE, acudieron a las urnas un millón 8 mil 141 personas, de un millón 765 mil 994 que conformaban el listado nominal, lo que por números absolutos representa el universo más alto de chihuahuenses que han ejercido su obligación cívica.

Sin embargo, en los comicios previos de 1992, cuando resultó electo Francisco Barrio, el ejercicio del voto fue de 62%, aunque por números no rebasa la cantidad anterior, ya que la lista nominal se conformaba por un millón 215 mil 550 ciudadanos.

Ante esa respuesta cívica, el parámetro de análisis en 1998 no fue el abstencionismo sino la participación ciudadana que en el estado reflejó estos resultados: En Camargo fue de 62.29%, en la capital del estado de 60.36%, la región sur de 58%, Cuauhtémoc de 56.33%, Delicias de 54.61% y Juárez de 52.89%.

Región sur, la que más vota

En las últimas cuatro elecciones a gobernador, los 16 municipios del sur del estado han tenido una mayor participación porcentual en votos que el promedio estatal.

Parral, Valle de Zaragoza, San Francisco del Oro, Santa Bárbara, Coronado, López, Allende, Jiménez, Balleza, El Tule, Huejotitán, Rosario, Guachochi, Guadalupe y Calvo, Morelos y Batopilas aportaron en la elección de 1998 el 1% del voto en la entidad, en 2004 fue de 8.73%, en 2010 de 23.65% y en 2016 fue de 8.45%.

Actualmente, estos electores representan el 11% del listado nominal que es de 2 millones 858 mil 784 ciudadanos empadronados que no es un dato menor, ya que en pasados comicios han definido con su aportación, el resultado final del conteo.

Por ejemplo, en 1998 participaron 100 mil 575 electores, lo que representa el 58% del ejercicio del voto, casi un punto porcentual arriba de la media estatal, que fue de 57.08%.

Seis años después, los 16 municipios del sur del estado sumaban 199 mil 883 votos, de los cuales 104 mil 111 personas acudieron a las urnas, lo que representó 8.73% más que el promedio estatal de votación.

En el siguiente sexenio, 94 mil 691 ciudadanos sufragaron, equivalente a una participación 23.64% por arriba de la media estatal.

Para 2016 se recabaron 135 mil 689 sufragios efectivos en la zona sur, que implicaron 8.45% por arriba de la media en la entidad.

En este proceso electoral, el universo de electores es de 316 mil 276 quienes incidirán en la designación del próximo gobernante al inclinar la balanza.

¿Por qué no vota la ciudadanía?

La consejera electoral Fryda Licano Ramírez, presidente de la Comisión de Participación Ciudadana del IEE, advierte en que se pueden registrar las mismas cifras de abstencionismo que en la reciente elección estatal, ya que se han detectado 4 factores para que la ciudadanía no vote: problemas políticos, seguido de sociales, psicológicos y los relacionados ahora con la pandemia.

“No existe una cultura cívica y la que hay es deficiente, ya que no se han formado ciudadanos que estén interesados en participar en la elección de sus gobernantes y esto se debe a que el 77% de los mexicanos no confía en sus autoridades”.

Licano Ramírez refirió que hoy se otorga el 25% de las candidaturas para jóvenes con el fin de motivarlos a que se involucren en la política y puedan atraer a otros e incrementar la participación de éstos.

Por ello, agregó, una de las líneas estratégicas que implementará el IEE es involucrar a los jóvenes en estos procesos, ya que representan el 48% en el rubro de abstencionismo.

Por su parte, el politólogo Abraham Paniagua Vázquez lamentó el abstencionismo de cada elección, en particular el registrado en el municipio de Juárez que suele reportar los niveles más altos.

“Por ejemplo, el electorado juarense dependerá mucho del transcurso de lo que queda de campaña porque no se está viendo muy identificado con el proceso y a ello se debe que miles no acudan a las urnas”, consideró el investigador de la Facultad de Ciencias Políticas de la UACh.

Numeralia electoral

De la aridez del voto

2016

Estatal: 50.5%

Juárez: 59.14%

Cuauhtémoc: 56.62%

Delicias: 50.9%

Chihuahua: 47%

Región sur: 43.18%

Camargo: 40.69%

2010

Estatal: 58.59%

Juárez: 70.41%

Cuauhtémoc: 62.96%

Delicias: 54.82%

Camargo: 51.92%

Chihuahua: 51.28%

Región sur: 31.95%

2004

Estatal: 55.85%

Juárez: 63.42%

Chihuahua: 50.56%

Camargo: 47.83%

Región sur: 47.22%

Delicias: 43.2%

Cuauhtémoc: 42.10%

1998

Estatal: 42.91%

Juárez: 47.11%

Delicias: 45.39%

Cuauhtémoc: 43.67%

Región sur: 42%

Chihuahua: 39.64%

Camargo: 37.71%

Fuente: IEE

Con información de Teófilo Alvarado y Jorge Macías

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