A días de que debe ser concluida la obra denominada “Trabajos faltantes en modernización y ampliación de la carretera Nuevo Casas Grandes-Puerto Palomas”, la empresa Gameros y Luévano Construcciones S.A. de C.V., no ha alcanzado si quiera el 20% de avance de la obra carretera que deberá ser entregada a finales del mes de noviembre.
Según lo estipulado en el acta de fallo con número LO-009000980-E68-2019, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), entregó 95 millones 352 mil 351 pesos a dicha empresa para la realización de la obra que vendría a beneficiar a miles de vecinos de comunidades aledañas y conductores que utilizarían el tramo carretero, sin embargo, pese a las acuerdos de entrega aún no sobrepasan ni la mitad del avance.
Lo estipulado en el contrato realizado entre el director de SCT en Chihuahua, Julio César Huerta, y la empresa Gameros y Luévano, acordaron realizar dicha obra en el tramo Nuevo Casas Grandes a Janos, sobre el kilómetro 230 al 239+500 en un plazo no mayor a 190 días que inició el conteo el día 29 de mayo del presente año.
“Sobre la ejecución de los trabajos de terracerías, obras de drenaje, pavimentación, obras complementarias y señalamientos en el municipio de Nuevo Casas Grandes” son algunas de las acciones que debería realizar la empresa Gameros y Luévano dentro de estos poco más de 9 kilómetros, pero en cambio sólo han logrado avanzar un 20% a 124 días del arranque oficial.
A pesar de que restan alrededor de 60 días para el límite de entrega de esta obra, los pobladores como diferentes autoridades de aquella zona del estado han denunciado que no existe un avance significativo en la obra, toda vez que en dos meses debe ser entregada y la empresa no ha querido trabajar en esta obra entregada por la SCT.
Algunos conductores como habitantes del sector señalan una serie de inconformidades por la realización de la obra, toda vez que ante el poco avance, sólo han tenido la maquinaria parada en el lugar y ha complicado el tráfico de los conductores y vecinos que comúnmente circulan por dicha zona.
La empresa Gameros y Luévano, de Eduardo Gameros, ha tenido una serie de señalamientos con el paso de los años, incluso en el año 2017, la Secretaría de la Función Pública en Chihuahua inició una investigación de tipo penal, por irregularidades realizadas durante el sexenio del exgobernador César Duarte.
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