Padres y madres de familia de la Escuela Primaria Estatal Juan Jacobo Rousseau tomaron la escuela para exigir que designen un director o directora y no cambien a la maestra de sexto grado.
Las madres de familia exigieron atención por parte de la Secretaría de Educación y Deporte, debido a que desde el ciclo anterior, están arrastrando problemas y no se ha resuelto nada, según expresaron.
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Señalaron que desde el mes de diciembre, la directora Janeth Sandoval Medina se fue tras ser denunciada por malos manejos administrativos, pero a pesar de ello, las autoridades educativas fueron omisas y la solaparon, aunado a ello, muchas maestras y maestros se fueron del centro escolar a consecuencia del bullying que la directora les hacía.
Los manifestantes exigen la atención de la ingeniera Denisse González, quien se encuentra en el nivel primaria y pretende llevarse a la maestra de sexto grado, bajo el argumento que no pertenece a ese centro de trabajo.
Con esta acción se van a fusionar los grupos de quinto y sexto grado, así como los grupos de primero y segundo, situación que provocó el enojo de las madres y padres de familia.
Las madres llegaron desde las 7:00 horas y el trabajador manual se encuentra dentro de las instalaciones del plantel por orden del encargado de despacho de la dirección, Crecensio Domínguez, inspector de la zona escolar 26.
Desde el mes de diciembre el inspector se ha hecho cargo de la escuela, sin embargo, tampoco ha podido resolver la situación, dicen los padres de familia.
Las madres de familia de sexto grado exigen que dejen a la maestra hasta que termine el ciclo escolar, ya que esta sería la segunda vez que les cambian al docente sin motivo.
“Quieren fusionar los grados como si fuera multigrado”, señaló Alejandra Orpineda Durán, madre de familia, a su voz, se unieron Iveth Trujillo y Minerva Escárcega.
En la zona, las madres y padres se dieron a la tarea de recolectar firmas, mismas que se van a anexar a un escrito que llevará una comitiva a la Secretaría de Educación y Deporte.
Sentenciaron que no liberarán la escuela hasta obtener una respuesta positiva, porque ya están cansados de que no haya solución.