La Fiscalía General del Estado (FGE) de Chihuahua ha identificado a cuatro de las personas fallecidas en el violento enfrentamiento entre civiles ocurrido el pasado lunes 16 de septiembre en la carretera Parral-Jiménez.
Mediante labores de investigación y análisis forense, se lograron identificar a cuatro de las víctimas. La identificación se realizó mediante lofoscopía forense (análisis de huellas dactilares) y el reconocimiento de características físicas particulares, como tatuajes y cicatrices.
Los fallecidos fueron identificados como:
- José Alberto C.V. de 27 años de edad, originario de Delicias.
- Abelardo M.B. de 38 años, originario de Hidalgo del Parral.
- Francisco Sebastián M.L. de 22 años, originario de Ciudad Juárez.
- Alfredo M.M. de 40 años, originario de Guadalupe y Calvo.
Los cuerpos de las víctimas fueron localizados en las inmediaciones del lugar del enfrentamiento, que ha sido señalado como un punto que conecta a Parral con Jiménez, un corredor históricamente utilizado para actividades ilícitas, entre ellas, el trasiego de drogas y armas.
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El proceso de identificación continúa en marcha para las demás personas fallecidas en el incidente, para lo cual se ha desplegado un equipo multidisciplinario compuesto por Agentes del Ministerio Público, Policías Investigadores y especialistas en antropología y genética forense. Dicho equipo sigue aplicando protocolos forenses avanzados con el fin de confirmar la identidad de las víctimas restantes y esclarecer las circunstancias que llevaron al enfrentamiento.
Además de las tareas de identificación, las autoridades han intensificado las labores de investigación para determinar los motivos que desataron la violencia, pues se especula que la confrontación podría estar relacionada con pugnas entre grupos de la delincuencia organizada, quienes en los últimos meses han estado disputando el control de rutas estratégicas en el sur de Chihuahua.
Organismos de seguridad y la FGE han redoblado esfuerzos para contener esta escalada de violencia, con operativos coordinados entre diversas corporaciones policiales y el Ejército Mexicano. Sin embargo, las características de los enfrentamientos, que suelen involucrar a grupos fuertemente armados y bien organizados, han hecho que las operaciones de seguridad sean un desafío constante.