El panteón de la comunidad de Villa Escobedo resguarda tumbas emblemáticas que datan desde el año 1896, lo cual preserva la historia de personas provenientes del extranjero.
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A través de un recorrido en el panteón de Villa Escobedo se pudieron registrar innumerables tumbas antiguas que datan del año 1897 como mínimo, en el camposanto del lugar.
Desde lápidas inscritas en latín hasta el actual español, en donde se puede registrar la existencia de las personas extranjeras que, sin embargo, radicaron en la ciudad y sus restos fueron colocados en donde abandonaron su legado.
A pesar de ser una comunidad pequeña, Villa Escobedo resguarda datos emblemáticos que abonan a la historia y patrimonio de Parral, recién denominado Pueblo Mágico.
Algunas de dichas tumbas quedaron resguardadas en este panteón bajo la maleza y tierra que, con el tiempo, ha causado que se vaya enterrando la memoria de quienes quizás realizaron obras en la ciudad; sin embargo, queda la historia.
La arquitectura de las tumbas varía, esto debido a que depende del año de su construcción, mismo que van desde 1896, 1924 y 1927 entre otras fechas.
Se trata de lápidas que han quedado en el olvido, ya que no queda descendencia de quienes ahí descansan, además de que quienes viven en el pequeño poblado, no se preocupan por la limpieza o cuidado de ellas.
Cabe destacar que entre los vestigios de las lápidas se pueden observar nombres de extranjeros, quienes sólo fueron sepultados en el campo santo y no se conoce más historia de ellos; por datos de investigación, se sabe que algunos llegaron para realizar trabajos en las minas de la región, la cual era rica en yacimientos.
Nota publicada en: El Sol de Parral