Parral, Chih.- En el marco del día de la Libertad de Expresión, periodistas que sufrieron ataques en el ejercicio de profesión en la región del sur del Estado de Chihuahua, dudan de las protecciones a comunicadores, casos como la agresión a tres trabajadores de esta empresa editora en 2018, así como el ataque al periódico El Monitor de Parral han dado la nota nacional, las normas de protección dicen, no soluciona o esclarece los ataques.
En entrevista con comunicadores que han sido víctimas de ataques o agresiones a periodistas en la región sur del estado, lamentan que las normas de protección a quienes ejercen la labor periodística, luego de haber sufrido ataques que incluso posicionaron a Chihuahua en el mapa mediático al darse a conocer, desconfían de la defensa que la autoridad les ofrece.
Uno de los ataques contra trabajadores de los medios de comunicación, que no ha dado respuesta, es el que esta casa editora sufrió en el 2018, donde tres empleados fueron golpeados brutalmente por uniformados que cateaban un domicilio una madrugada del primero de marzo del 2018.
Como se hacía un acordonamiento que denotaba trabajo policiaco, al ver que los empleados tomaron fotos, fueron agredidos por supuestos agentes y el hecho generó la inconformidad de El Foro de Periodistas de Chihuahua A. C. para pedir protección según la nota publicada el día mismo de este suceso en este rotativo.
Por temor a dos años del suceso, uno de los empleados agredidos omitió su nombre, mencionó que la respuesta de las autoridades fue buena al momento, pero sobre lo ocurrido nunca se les dijo nada a quienes estaban involucrados sobre los avances de alguna investigación.
Otro tema que dio revuelo en todo el país, fue el 31 de julio del 2019 cuando un periódico impreso en la ciudad de Parral fue atacado con bombas Molotov, mismo que cerró su impresión diaria dejando sin respuesta a la amenaza terrorista del crimen organizado.
El entonces director del periódico que sufrió dicho terrorismo, Jorge Luis Salayandía, explicó que en su momento abordaron al presidente López Obrador en su visita a por la región para exigir mayores medidas de protección.
El director del medio en su momento, reiteró que lo único que le interesaba es que dentro del mecanismo se buscara un esquema para reactivar la labor periodística, porque si bien se le asignó a su persona una escolta como medida de prevención, esto no garantizó que se pueda abrir las instalaciones y recuperar el servicio del periódico.
El caso de Jesús Ortiz, quien está actualmente en un medio digital local, narra experiencias que vivieron al lado del fallecido y reconocido Fernando Lara Guerrero y Erika Marín, locutora en La Poderosa de Parral, siendo este uno que ha llevado protección por ataques hacía su labor periodística y cuenta al menos dos agresiones que dieron nota nacional.
El temor de escribir una nota al día siguiente destaca, “es igual que el temor de desconfiar si la autoridad estará con los intereses de quienes nos atacan”, dijo que los casos no se aclaran y destacó que las consecuencias generalmente son por la labor periodística que afecta intereses de algunos otros que incluso están dentro de los medios de comunicación.
En este sentido, expone fotografías y vídeos que en las redes sociales, notas en videos en vivo muestran como son supuestamente acosados por la autoridad, mientras que las demás evidencias de los ataques, está, la autoridad actúa con protección pero la respuesta de fondo, no se aclara.
Afortunadamente en la región, no se han registrado asesinatos a periodistas, como el caso de Chihuahua y Juárez, donde destaca el caso de Miroslava Breach que a cuatro años del caso, sólo hay un detenido.