Un total de 79 personas mayores de 65 años se encuentran privadas de la libertad, muchos de ellos ya se encuentran sentenciados y no saldrán de prisión por su propio pie, por lo que se cuenta con áreas de cuidados especiales y dietas bajas en glucosa para quienes padecen de enfermedades cronicodegenerativas.
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De acuerdo a las estadísticas de la Fiscalía Especializada en Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad, actualmente 16 personas se encuentras privadas de la libertad en proceso, además hay otros 63 reos que son mayores de 65 años y que ya fueron sentenciados por los delitos de homicidio, violencia, robo.
La vulnerabilidad de estas personas se incrementa con la edad al tener algún padecimiento, discapacidad o cualquier otra característica que los pueda colocar en desventaja, por lo que se les ofrecen condiciones de internamiento para atender su derecho a la reinserción social y acceso a una vida digna.
Entre los programas con los que se cuenta en el estado está el curso de ajedrez, cursos de papiroflexia y pintura. Además en los módulos se tienen estancias adecuadas para personas que requieren sillas de ruedas o andador.
En cuestión médica son atendidos por un geriatra y cuentan con un plan de nutrición específico, ya sea dieta blanca, baja en sodio o en glucosa.
Hay que recordar que el año pasado una de las propuestas del gobierno federal, bajo el liderazgo de Andrés Manuel López Obrador, era entregarles beca bimensual por un monto de 2 mil 500 pesos a los adultos mayores de 68 años y más.
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