El presidente municipal de Aldama, Miguel Rubio Castillo, convocó a pobladores de ese municipio para retirar por su cuenta los 50 topes que fueron colocados a ambos lados de la carretera Chihuahua a Aldama, a la altura del kilómetro número 17, donde se encuentra el fraccionamiento Los Álamos, a falta de respuesta de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, ante quien había presentado la petición.
La colocación de los topes vibradores fue parte de la medida de reducción de velocidad en ese tramo carretero, donde se fijó como velocidad máxima 60 kilómetros por hora, y desciende gradualmente a 40 y finalmente en el kilómetro 17, impone al tráfico una máxima de 20 kilómetros por hora.
La medida de reducción de velocidad fue considerada como arbitraria por Rubio Castillo, quien acompañado de colonos, retiraron los vibradores durante la mañana de ayer, a partir de las 8:00 horas, logrando quitar el total de cien topes vibradores en ambos lados de la rúa y un pase peatonal.
De acuerdo con el edil, los reductores representaban un riesgo en cuestión de seguridad, considerando la velocidad que alcanzan los automóviles sobre la carretera, el número de carriles, y el libre tránsito que afectaba a vecinos de Los Álamos, Residencial Los Leones, La Mesa, El Jagüey, entre otros, además de turistas que cruzaban por el lugar, provenientes de la frontera por Ojinaga.
La solicitud se hizo a través de un oficio fechado el 25 de septiembre, y después de tres semanas sin respuesta, el gobierno municipal decidió retirar por su propia mano los reductores.