Cd. Cuauhtémoc, Chih.- Una trabajadora de la mina El Concheño, en Ocampo, que solicitó el anonimato, señaló que luego del anuncio del acuerdo establecido con la empresa ésta envió a descansar a varios trabajadores y está llamando a otros a laborar, pero de forma selectiva. Comentó que aunque una de las decisiones tomadas es que se cambiaría a quienes lideran el sindicato perteneciente a la CROC, éstos se encuentran en la mina pugnando por permanecer.
El lunes de la semana pasada pararon labores al menos 200 trabajadores, pues se dieron cuenta que a inicios de año la mina cambió de razón social. Sin embargo, el miércoles sostuvieron un diálogo con la empresa, que se comprometió a no quitarles su antigüedad y descartó hacerlos firmar otro contrato.
Entre las represalias tomadas durante lunes, martes y miércoles, fue restringirles el acceso al campamento a los foráneos, así como el alimento, por lo que tuvieron que pernoctar en el monte.
La entrevistada mencionó que hasta este sábado la forma de actuar de la empresa ha sido extraña, pues comenzó a dar descansos de forma arbitraria, es decir a obreros que no les correspondía, dejando de lado la necesidad de recuperar la producción perdida. No obstante, mientras a unos los obligan a permanecer en sus casas a otros los llaman.
De momento, dijo, prevalece el temor de que el pago llegue incompleto y que el acuerdo no se cumpla. Por otra parte, consideró que pueden comenzar los despidos, debido a que cuatro faltas son motivo de baja automática.
Expuso que durante la semana pasada nadie renunció.
Señaló que quienes sí permanecen en la mina de manera constante son las cabecillas del Sindicato de la CROC que desde un inicio dejó solos a los trabajadores y se alió con la empresa, lo que apunta a una protección por parte de la mina El Concheño al sindicato, que muy posiblemente aborda a cada uno de los obreros que están llamando a laborar.