El presidente seccional de El Charco, Carlos Alberto Ramos Hernández, rechazó haber agredido a Mónica Márquez, esposa de su antecesor en el cargo, Raúl Ortega, y aseguró que las heridas visibles en su rostro fueron provocadas por la mujer, que lo atacó el pasado viernes mientras finalizaba el proceso de entrega-recepción de la Presidencia, en las instalaciones de la Dirección de Desarrollo Rural del municipio.
En entrevista, el funcionario señaló que tras haber sido objeto de agresiones físicas y amenazas por parte de Raúl Ortega y su esposa, acudió el día de ayer a las instalaciones de la Fiscalía General del Estado Zona Centro, donde interpuso una denuncia por las lesiones recibidas.
“No la golpeé, ni la raspé siquiera, lo único que hice fue intentar quitármela de encima”.
Asimismo, detalló que el nuevo presidente seccional de la comunidad de Ciénega de Ortiz, Antonio Mendoza, también acudió a la Fiscalía para denunciar a la pareja, a causa de las amenazas que profirieron en su contra el mismo día.
“Todo fue cosa de un instante, a Mónica (Márquez) le molestó que le pidiera se retirara de la oficina donde estábamos Raúl Ortega, yo, y los presidentes de Ciénega de Ortiz y Soto, ya que ella no tenía nada que ver en el proceso, él mismo me pidió que habláramos, pero a ella no le pareció, y de pronto se me echaron encima los dos, y como pude intenté quitármelos de encima. Tras ello, Raúl volteó a ver a Antonio Mendoza, y le dijo enseguida sigues tú”, relató.
Por ello, enfatizó que tanto él como Antonio Mendoza harán responsables a Raúl Ortega y a Mónica Márquez de cualquier violación a su integridad.
El alcalde ahora en funciones denunció también que ésta, pese a no haber tenido ninguna responsabilidad legal en la sección municipal de El Charco, durante la pasada gestión se condujo como titular de la Presidencia, “ordenando y mandando qué hacer, aun cuando no le correspondía por ser su esposo el alcalde, ella llevaba el gobierno cuando estaba su esposo, por eso quería entregar la administración”.
“Son gente muy problemática y conflictiva, nosotros creemos que todo el enojo viene de no haber logrado la reelección en el cargo, aún después de que disputaran la elección y se corroborara que perdieron por tres votos”, mencionó.
Sin embargo, expuso que el detonante de la disputa, en la que tuvo que intervenir la Dirección de Desarrollo Rural para mediar entre las parte involucradas, fue que como una de sus últimos actos al frente de la Presidencia, Raúl Ortega decidió extraer toda la gasolina de los vehículos oficiales de la Presidencia.
Explicó que conforme a la disposición legal de la comunidad, a cada funcionario le corresponden 233 litros de gasolina por mes para recorrer la región y cumplir con sus obligaciones. En el caso de lo correspondiente al mes de enero, denunció que el equipo de trabajo de Raúl Ortega extrajo el combustible de los vehículos el día primero del año, pese a ser una fecha inhábil.
Tras ello, Carlos Ramos acudió a la Dirección de Desarrollo Rural para denunciar “el despojo” del que fueron objeto, ante lo cual la dependencia decidió mediar entre las dos partes, para acordar la reposición del combustible con una parte devuelta por el equipo de Raúl Ortega, y el resto siendo aportado por la dependencia.
A lo anterior se añade, relató el presidente en funciones, la falta de comunicación entre la Dirección de Desarrollo Rural y la Presidencia Municipal, la cual obedece, consideró, al encono que priva en la dependencia “por no haber podido imponer a sus candidatos”.
“Como el presidente de Ciénega de Ortiz y yo somos independientes, hemos llegado a pisar callos. Yo ya había sido presidente seccional hace varios años, y ahora veo las cosas muy cambiadas, mucha incomunicación por parte de la Dirección, no nos informan de nada y han hecho caso omiso a nuestros comentarios”.
Asimismo, reiteró su compromiso y disposición para trabajar con el municipio de Chihuahua y sus diferentes dependencias, pese a que en la Dirección de Desarrollo Rural “son tratados como extraños”: “No queremos ninguna confrontación, no estamos en contra ni de la alcaldesa ni del gobernador, al contrario, queremos ser gestores, facilitadores de los apoyos”.
Respecto a los señalamientos del Instituto Chihuahuense de las Mujeres, que pidió su destitución inmediata del cargo tras darse a conocer los hechos arriba señalados, Carlos Ramos consideró las declaraciones de Emma Saldaña, titular del organismo, como “muy desafortunadas, yo creo que antes de apresurarse a emitir un pronunciamiento, deberían haber investigado más, haber comprobado si la señora Mónica en realidad fue lastimada”.
“No me gusta la violencia, no busco el conflicto, creo que el diálogo es la mejor manera de resolver conflictos”, concluyó.
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