Las tradicionales y coloridas bolsas de ixtle o redes para el mandado, que durante décadas fueron utilizadas por amas de casa, regresan y no precisamente por moda o por gusto, sino porque desde el pasado jueves, oficialmente los comercios de todo el estado no pueden ofrecer bolsas de plástico a sus clientes.
Lo anterior debido a la modificación a la Ley de Residuos del estado de Chihuahua, que por el momento sólo deja dos opciones: las bolsas biodegradables que significan un alto costo para los empresarios, o bien, volver a la usanza de las mexicanísimas bolsas de malla o red, como antaño.
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A partir del pasado 29 de agosto quienes entreguen bolsas a los clientes podrían hacerse acreedores a multas desde los 2 mil hasta 250 mil pesos.
La justificación para obligar a los comercios a no empacar más en bolsas que dañan a la ecología es porque, de acuerdo con la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología, una familia consume en promedio 30 bolsas de plástico a la semana y el uso que se les da es de una sola ocasión causando un fuerte impacto negativo a la ecología.
Dadas las modificaciones en la ley, mujeres de todas las edades comenzaron a comprar las redes que en algún momento se consideraron feas, pasadas de moda y hasta de mal gusto.
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Lo cierto es que se abren nuevos mercados, pues en supermercados, estanquillos de barrio y hasta tiendas online, ya se pueden adquirir redes de todos tamaños, colores y diseños, con precios desde los 12 hasta los 200 pesos.
Para los más exigentes, las bolsas pueden ser personalizadas con fotos de sus artistas favoritos, imágenes religiosas o hasta de sus amadas mascotas.
Es un hecho que la disposición lleva en gran parte reaprender la cultura del cuidado del medio ambiente.
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