Aún y con el cambio de semáforo epidemiológico al color amarillo, establecimientos como haciendas podrían dejar de trabajar prácticamente en lo que resta del año, ya que al ser espacios al aire libre, el tema del clima es un problema, por lo que sumarían al menos nueve meses sin operar, de acuerdo con información de Alejandro Lazzarotto, presidente de la sección especializada de Salones de Eventos de Canaco.

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Por otra parte, existe incertidumbre si los salones de eventos infantiles podrán regresar junto con el resto o deban esperar más.

“La afectación sigue siendo muy grande. El presidente de la Canaco decía que entre el sector restaurantero, turístico y de salones de eventos se calculan pérdidas por 900 millones de pesos. Nosotros debemos andar alrededor de los 400 millones de pesos”, dijo.

Asimismo, el presidente de sección expuso que la permanencia del semáforo en naranja sigue afectando al gremio, sobre todo contemplando que casi todo lo que son las granjas y haciendas ya no podrán hacer eventos prácticamente todo el año, “entonces esto pone en una situación crítica”.

Lo anterior al argumentar que el clima es un factor en contra para el desarrollo de eventos en dichos sitios, ya que la mayoría de las haciendas están al aire libre.

“Estamos esperando que en realidad a partir de octubre, a todos los que nos quedamos, nos dejen trabajar, incluyendo los salones infantiles, ya que a ciencia cierta no se sabe si van a dejarlos hasta el verde o si van a poder abrir en la luz amarilla, y eso también es una afectación bastante grande la que se tiene”, apuntó el entrevistado, al momento que detalló que aproximadamente 30 salones de eventos infantiles están afiliados a Canaco.

En cuanto al protocolo de reapertura de salones de eventos presentado ante la Secretaría de Salud, Lazzarroto expuso: “lo que nosotros habíamos entendido y que luego nos aterrizaron es que antes de que cambiara la luz iban a designarnos una persona para que estuviera haciendo las auditorías a los salones y que una vez que cambiara la luz, prácticamente en ese momento pudiéramos trabajar las personas que estuviéramos certificadas, pero no pasó así”, refirió.

Ante esto, aseguró que los agremiados a la Cámara prácticamente están listos y que, lo que están haciendo como agrupación es ver qué necesitan todos los agremiados para poder cumplir con el protocolo que ya está aprobado de manera general. Cabe mencionar que ya cada salón tendrá que meter su información al IMSS.

Para un seguimiento puntual, se creó una comisión para verificar que cada salón acate todas las medidas, y que si no se logra por cuestiones de dinero, entre todos apoyarán para que la totalidad del gremio cuente con tapetes sanitizantes, termómetros, etcétera, a fin de que cumplan con lo estipulado.

“Porque una cosa nos queda muy claro a los salones que estamos agremiados a la Canaco: que la idea es estar bien regularizados; aunque somos los más lastimados y auditados, y las fiestas se siguen haciendo, en realidad nosotros no queremos ser la razón por la que la gente se enferme”, abundó.