El presidente municipal de Chihuahua, Marco Antonio Bonilla Mendoza, se reincorporó a sus actividades habituales como alcalde de la ciudad de Chihuahua este lunes 6 de noviembre, luego de haberse ausentado el viernes 3 de noviembre, para atender situaciones familiares.
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El anuncio se hizo el pasado miércoles 1 de noviembre, en el que se aclaró que el jueves 2, por ser Día de Muertos, era considerado día de asueto, contabilizando como ausencia únicamente el viernes 3, pues el sábado 4 y domingo 5, son considerados como días de descanso.
El cargo fue asumido temporalmente por el secretario del Ayuntamiento, Roberto Andrés Fuentes Rascón, de acuerdo a la normativa que dicta el artículo 100 del Código Municipal del Estado de Chihuahua, en casos de ausencia del alcalde, la responsabilidad del despacho de la Presidencia Municipal recae en el titular de la Secretaría de Ayuntamiento.
Así mismo, la legislación estipula que cuando el alcalde abandone el municipio por un período de cinco días o menos, o en días inhábiles para la administración, no es necesario notificar al Ayuntamiento; sino que solo es necesario informar al titular de la Secretaría –en este caso, Roberto Fuentes Rascón-, para que se haga cargo de los asuntos de la Presidencia, respetando las atribuciones que la ley le confiere y sin interferir en las facultades propias del alcalde.
A través de sus redes sociales, Marco Bonilla, compartió el apoyo que le brindó a su hijo, quien se ha destacado en sus actividades deportivas, mientras representaba al equipo de futbol Club Independiente Chihuahua, en la ciudad de Mazatlán, Sinaloa, donde se jugó la Copa Mazatlán 2023, donde la escuadra chihuahuense logró el título de subcampeones, con reconocimientos a los campeones de goleo y los mejores porteros del torneo.
El alcalde Bonilla, durante su gestión como presidente municipal, ha destacado la gobernanza desde la perspectiva de familia, al lado de la presidenta del DIF Municipal, Karina Olivas Maldonado, e iniciativas para lograr un balance entre trabajo y familia, como parte del bienestar de la población chihuahuense.
Finalmente, y como elemento de transparencia dentro de su gestión, difundió la ausencia en la ciudad de Chihuahua, que fue de un día labora, es decir, menos de cinco días, por lo que no requirió la intervención del Cabildo; y aclaró que mantuvo comunicación y coordinación vía remota para estar al tanto de la situación de la administración municipal, en su ausencia.