"Tengo 12 años cumpliendo con esta tradición; consiste en dar un recorrido por el panteón de Dolores, donde la gente ya nos espera para tomarse una foto con nosotros," explicó María del Carmen Rosales, mujer chihuahuense que busca preservar la tradición de las catrinas.
"Por lo general el que me acompaña es mi pareja, sólo que por cuestiones de tiempo y posibilidades, ahora me acompañó mi primo; llevo 12 años vistiéndome así, cada año le agregó algo distinto al disfraz, en esta ocasión fue el color azul".
La catrina chihuahuense explicó que todo comenzó hace 12 años, cuando un día andaba disfrazada y decidió irse así al panteón en donde da el recorrido, y al ver el gusto de la gente, repitió al otro año, agregando una prenda más a su vestuario, hasta conformar el traje de ahora.
"El disfraz lo hacemos nosotros mismos, pues no tiene mayor ciencia, ya que utilizamos maquillaje común, que se consigue en las tiendas; sin embargo, lo más importante es el tiempo que uno le dedica".
María del Carmen se encontraba acompañada de su primo Iván Ruiz, quien tiene menos tiempo, pues tan sólo en dos ocasiones la ha acompañado, sin embargo concuerda en que la tradición originaria de México debería ser preservada en los más chicos.
"Voy a seguir con esta tradición hasta donde pueda; es importante inculcar este tipo de costumbres a los más jóvenes, para que no sólo piensen en Halloween, pues también tenemos costumbres aquí", señaló el joven catrín.