Los dos principales distribuidores de droga para el Cártel de Sinaloa en la ciudad fueron asesinados ayer tras un ataque armado en el interior del Club Gallístico Santa María, ubicado sobre la carretera a Cuauhtémoc, que dejó como saldo otras cuatro personas fallecidas y 14 heridos, entre ellos cuatro menores de edad.
Héctor Murillo Tavares, alias el Cochiloco, se encargaba de la distribución de droga en el territorio al sur de la ciudad controlado por Manuel “Don Meny” Arzola Campos, quien es el encargado de plaza de Chihuahua para el Cártel de Sinaloa; Josué Otero era el lugarteniente en la zona norte en los terrenos controlados por Don Meny.
Además, el Cochiloco era sobrino de Karla Gutiérrez, mejor conocida como La China, a quien se le menciona en un narcocorrido como la encargada de la plaza en Témoris, Chihuahua, y quien está vinculada con el grupo criminal Los Salazar, todos al servicio del Cártel de Sinaloa.
En Chihuahua Manuel Arzola Campos controla a un grupo de delincuentes que se hacen llamar Gente de Don Meny, encargados de la distribución de narcóticos en la zona sur, centro y norte. Este grupo pertenece al Cártel de Sinaloa y los encargados están vinculados con líderes en la zona serrana de la entidad.
Don Meny está vinculado a los grupos de Gente Nueva en la zona serrana y, según datos de inteligencia, obedece las órdenes de la familia Salgueiro, fundadora del brazo armado al servicio del Cártel de Sinaloa.
El sobrino de La China trabajaba bajo las órdenes de Don Meny y era el principal distribuidor de droga en la zona sur de la ciudad. La Fiscalía General del Estado ya lo buscaba y tenía identificado como el líder de los narcomenudistas en varias colonias al sur.
Entre las colonias de las que El Cochiloco estaba encargado están las ubicadas entre el periférico Lombardo Toledano y bulevar Fuentes Mares, desde la avenida Juan Pablo II hasta el Libramiento Oriente. También estaba encargado de las colonias al sur del periférico R. Almada como: 3 de Mayo, Toribio Ortega, Vista Hermosa, 11 de Febrero, Las Torres y las aledañas al cerro Grande.
A otro de los fallecidos, Josué Otero, la Fiscalía General del Estado ya lo buscaba y era uno de los principales objetivos a capturar dentro de la estrategia de combate al narcomenudeo.
Otero estaba identificado como el principal distribuidor de droga en el norte de la ciudad, encargado del territorio controlado por Don Meny en aquella zona.
Los terrenos al encargo de Josué Otero están ubicados desde la avenida Homero hasta la salida a Juárez, entre la avenida Tecnológico y vialidad Sacramento, entre los que están colonias como Chihuahua 2000, Granjas del Valle, Minerales, Montecarlo y Villas del Real en sus varias etapas.
El principal objetivo de los pistoleros de La Línea en el ataque era Héctor Murillo Tavares, alias el Cochiloco, y fue por la batalla entre los grupos Gente Nueva y La Línea por el control de la venta de narcóticos en la ciudad que se realizó el ataque, según las primeras indagatorias.
Los pistoleros habrían ubicado al Cochiloco y varios de sus allegados en el lugar, y la orden para atacar a los integrantes del grupo Gente de Don Meny se habría tomado durante una reunión de líderes de La Línea el pasado sábado durante un concierto que ofreció el intérprete de narcocorridos, El Porteño de Sinaloa.