El 5 de mayo de 2018 la exconductora Griselda Ramos falleció debido a un procedimiento estético mal realizado por el médico Érick Espíritu, quien se ostenta como especialista en cirugía plástica y que actualmente opera en una clínica de Cuauhtémoc ubicada en la calle Guerrero, sobre la Agustín Melgar.
Nueve meses después del lamentable deceso, las autoridades no han logrado penalizar a Espíritu, quien cuenta con demandas penales por usurpación de funciones y supuesto homicidio culposo.
Ashley Ivonne Ramos Sáenz, hija de la occisa, compartió con El Heraldo de Chihuahua su sentimiento ante el nulo avance de dicho proceso penal: “Hasta ahorita el caso no avanza, seguimos en lo mismo desde el año pasado. Me encuentro muy inconforme… en pocas palabras les vale que sigan pasando estas cosas. Yo quiero ayudar a prevenir, porque así como fue mi mamá puede ser cualquier persona y hasta que no paren a este disque doctor la gente seguirá cayendo. Ha habido muchos casos de personas a las que les pasa lo mismo y por alguna razón los que se hacen llamar cirujanos plásticos pueden engañar a la gente muy fácilmente, con cualquier cosa falsa. Sé que gobierno y la autoridad pueden hacer algo, pero se les pasa o no les interesa”.
Los sentimientos de impotencia y coraje están presentes en su vida cotidiana, según explica Ashley, pues asegura que el caso de su madre pudo evitarse si desde hace tiempo se hubiera realizado algún trabajo de auditoría. “Siento mucha impotencia y coraje ante la respuesta de las autoridades… son muchos sentimientos. Estoy dispuesta a platicar del caso de mi mamá con el fin de que las demás personas comprendan el daño que puede causar el ponerse en las manos equivocadas”, asegura.
Por su parte, el doctor Ernesto Theurell Sangeado, especialista en cirugía plástica y único perito en la materia en el norte del país, asegura que el problema en todo el estado es fuerte, sobre todo en Ciudad Juárez por el gran movimiento de gente que hay, y en primer lugar por la intrusión existente, la cual es la usurpación de profesiones.
“Es increíble que la mayoría de estos médicos de profesión no tengan sensibilidad y maten gente o que dejen a las personas mutiladas o con secuelas permanentes… ¿En dónde queda esa vergüenza profesional, esas ganas de hacerle un bien a la gente?, es un gran problema de valores y ética”, explica el especialista.
En el caso de Espíritu, el cual se denomina a sí mismo como “estético”, se incurre en varios delitos penales; en primer lugar se encuentra la usurpación de funciones y en segundo la negligencia y mala praxis. “Es como si yo, especialista en cirugía plástica, quisiera hacer una cirugía de neurología… pues eso no me da las acreditaciones ni la experiencia necesaria para atreverme a abrir un cráneo”, asegura el doctor.
Actualmente han sido descubiertos varios médicos llevando cursos online en una universidad de Veracruz, con el fin de convertirse en especialistas estéticos, sin embargo en dichos cursos no se encuentran experiencias hospitalarias, no realizan residencias y mucho menos exámenes de selección y salen con conocimiento de que no tienen los estudios necesarios para abrir locales y operar. Su principal herramienta es la publicidad en redes sociales, donde atraen a sus clientes con engaños y lamentablemente terminan sin vida o con lesiones para siempre.
Al caso de Griselda Ramos, según explica el especialista, se le dio el seguimiento necesario, pues sus hijas pusieron las demandas correspondientes, además de los peritajes realizados, donde se arrojó que el médico incurría en varios delitos.
El proceso ha sido demasiado largo, sin embargo con las pruebas presentadas la juez Katy Uranga calificó el acto como accidente y no levantó la orden de aprehensión en contra del supuesto asesino. Ante la decisión de la jueza, el Colegio de Cirujanos Plásticos de Chihuahua quedó inconforme pues las pruebas comprobaban el grave delito.
“Desde antes se había cometido la grave decisión de dejarlo libre bajo fianza cuando es un homicidio culposo, no imprudencial, y según el Código Penal el culposo no alcanza libertad bajo fianza”, explica Theurell.
Las autoridades también incurren en diversas omisiones al no tipificar el problema que se está suscitando. “Una persona que sabe que no tiene los estudios, la experiencia, la habilidad y todo lo que se necesita para llegar a ser un especialista, a pesar de eso y a sabiendas de que puede llegar a quitarle la vida a alguien, se meten a un quirófano, por lo que la acción se realiza con dolo, catalogándolo como un homicidio culposo”, asegura.
Todos los quirófanos o centros médicos que se prestan a este tipo de situaciones también incurren en una enorme falta de ética y profesionalismo, pues es una complicidad enorme, desde el hospital, el anestesiólogo, hasta las enfermeras. “No sabemos si existen problemas de corrupción en el caso, pero todos los factores señalan de que así lo es, es muy fácil sospecharlo, desde la autopsia realizada a Ramos, la cual era irregular, desde ahí detectamos algo muy raro ya que en vez de ayudar a la ciudadanía, están protegiendo a personajes siniestros como lo es Espíritu”, explica el doctor.
La búsqueda de la resolución es meramente por propósitos sociales, pues los verdaderos especialistas se encuentran preocupados ante el sedentarismo de las autoridades, las cuales, a pesar de tener las pruebas suficientes enfrente de ellos, siguen sin hacer nada. A partir de la denuncia penal impuesta el pasado mes de noviembre por la directora estatal de Profesiones, Fátima Guzmán, en contra de Espíritu por la usurpación de profesión, se esperaba obtener la resolución del caso, pero hoy, nueve meses después del penoso evento, sigue operando en una clínica de ciudad Cuauhtémoc.
El Poder Judicial que existe, así como la jueza Uranga, parece que no tienen jurisprudencia, según explica el doctor Theurell, pues el delito de dolo eventual se castiga irremediablemente con cárcel o simplemente se hace omisión del caso.
“Nos llevamos una gran sorpresa, pues aún con los claros y obvios dictámenes periciales, no se llegó a la aprehensión… a veces los intereses económicos manejan este tipo de situaciones”, complementa el perito.
¿Qué tiene que suceder para que este tipo de personas paguen lo que hicieron?, es una pregunta que carece, lamentablemente, de respuesta alguna por parte de las autoridades, pues las pruebas y evidencias están sobre la mesa. ¿Cuántas muertes más tienen que existir para que pare este grave delito?
El Colegio de Cirujanos Plásticos de Chihuahua se encuentra en protesta ante la falta de compromiso social que muestra la autoridad, pues se exige la resolución inmediata del caso de Griselda Ramos con el fin de que se penalice al acusado para prevenir más muertes en el estado.
Te puede interesar: