"Urge una estrategia de seguridad, no sólo policial, sino social, laboral, familiar, eclesial. ¿Por qué nuestros jóvenes se dedican al narco, al triste negocio de la muerte? ¿Por qué se mata y se asesina así? ¿Tan bajo hemos caído? Un grito al cielo suplicando misericordia", expresó el vocero de la Arquidiócesis de Chihuahua, Pbro. Gustavo Sánchez Prieto, por el atentado contra la familia LeBarón y la jornada sangrienta que enlutó a la ciudad de Chihuahua durante el llamado 'lunes negro'.
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Sobre la masacre contra los LeBarón, en la que fueron asesinadas tres madres de familia con sus hijos, y pudieron escapar seis niños más, señaló "la noticia nos cubre de dolor, de tristeza y de vergüenza. Cada crimen clama al cielo, nos mueve a la oración, encomendando el alma de los difuntos a la misericordia de Dios, pedimos por ellos, por sus familias, por todos. Nos duele la muerte y la triste forma en que fueron ejecutados. Niños, mujeres, es triste, duele como nos duele cuando se trata de varones, jóvenes, policías, travestís, o sicarios", dijo al tiempo que enfatizó cada vida es sagrada.
Condenó los crímenes cometidos por motivos económicos, políticos, religiosos, o sociales.
"Un grito a nuestras familias, comunidades, escuelas y parroquias. Necesitamos educarnos en el respeto a la vida, desde el embarazo. Respetar cada vida, así viva la persona con otros valores o criterios. Defender cada vida, más allá de su clase social, convicción política, religiosa y orientación sexual", declaró.
Así mismo hizo una llamada fuerte a las autoridades, a quienes reclamo que no se puede vivir en el miedo, ni acostumbrarse a noticias de crímenes.
"Necesitamos estrategia de seguridad para todos. Policía, ejército, necesitamos de su servicios", finalizó.
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