El presidente municipal de Aquiles Serdán, Ariel Fernández, se destapó como aspirante a presidir el Comité Directivo Estatal del PRI, para lo cual pedirá a las autoridades del partido que se abra el proceso para la selección del próximo dirigente, para que sea la militancia la que elija a quien dirigirá al Revolucionario Institucional rumbo al 2024.
El priista explicó que con esta aspiración busca implementar al interior del partido, acciones que vayan encaminadas a eliminar el cobro de las candidaturas, así como promover la inclusión de todos los equipos en las actividades propias del partido tricolor.
Subrayó que durante su trayectoria se ha destacado por ser alguien que gana las contiendas y quien tiene la capacidad de crear mucho con poco, lo que resultaría muy benéfico para el partido, tomando en cuenta la situación financiera por la que pasan actualmente.
Recordó que en el año de 1998 vivió su primer proceso democrático, cuando ganó la Sociedad de Alumnos del CBTIS en Camargo, posteriormente ese mismo año en otro proceso abierto, logró ganar por la dirigencia del Frente Juvenil Revolucionario en esa ciudad; en el año 2010 ganó al integrarse a una planilla de regidores y en el 2016, triunfa en la elección por la presidencia municipal de Aquiles Serdán, en esa ocasión abanderado por el Partido Verde Ecologista de México, acción que fue refrendada en 2018 al ganar la reelección pero ahora abanderado por el PRI.
“Con esto quiero dar a conocer que soy un político de triunfos, que sabe ganar elecciones; tengo el municipio con mayor crecimiento en el estado y con el presupuesto más pequeño en relación con el número de habitantes, con esto demuestro que tengo la capacidad para hacer las cosas”, detalló Ariel Fernández.
Comentó que dentro de sus logros como alcalde, se encuentra la atracción de grandes empresas que se instalaron en el municipio y que generan un importante número de empleos, así como la activación de espacios turísticos, los que llevan a la gente una gran derrama económica.
Destacó que buscará llegar a un PRI sin recursos, quebrado y con muy poca maniobra financiera, para ser la persona que con lo poco que se tiene se puedan obtener muchos logros, con nuevas ideas, con arduo trabajo y transparencia para que los empresarios, los militantes y los propios ciudadanos puedan volver a confiar en el partido.
Hizo énfasis en que el Revolucionario Institucional necesita una renovación y ser abierto a la militancia y a la ciudadanía, así como llamar y convocar a la unidad, para que todos aquellos que se han ido puedan ser escuchados, conocer las razones por las que se fueron del partido y poder trabajar en ello para poder reunificar a toda la estructura.