CD. JUÁREZ, Chih.- Un total de 3 mil vehículos "chuecos" fueron asegurados y puestos a disposición de la Secretaría de Hacienda y la Secretaría de Administración Tributaria por parte de la Comisión Estatal de Seguridad, según lo informó el comisionado Óscar Aparicio Avendaño.
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Todos estos automotores fueron decomisados en puntos carreteros y brechas del estado, que comúnmente son utilizadas por la delincuencia organizada para el tráfico de armas, drogas, fayuca y vehículos de contrabando, tras haber reforzado la CES la vigilancia en estas zonas desde finales de 2018.
Aparicio mencionó que la vigilancia se mantiene en los filtros de los tramos que conectan a Parral con Jiménez, Villa Ahumada y en Nuevo Casas Grandes, de manera coordinada con la Guardia Nacional, Secretaría de Defensa Nacional y la Fiscalía General del Estado.
Durante la entrevista puntualizó que ninguna otra corporación o administración ha puesto mano dura a esta problemática como la actual, ya que miles de carros son internados de manera clandestina al interior del país usando nuestra frontera y el estado de Chihuahua como punto de ingreso.
"Donde más aseguramientos hemos tenido por la naturaleza, por ser una franja fronteriza y ser una de las ciudades del estado de Chihuahua con mayor población, es obviamente Juárez y en la zona sur del estado, es donde se han tenido más decomisos de este tipo de vehículos", agregó Aparicio Avendaño.
Por su parte, loteros y vendedores de autos han platicado para El Mexicano la forma en que cruzan a través de la Aduana Fronteriza y después se internan a estados como Coahuila y Durango a través de nuestro estado, en contubernio con personal de Aduana y elementos de la Policía Federal.
Para cruzar el vehículo de El Paso, Texas, a Ciudad Juárez, se pagan cerca de 300 dólares por unidad, de los que US$200 van a dar al personal de la Aduana Fronteriza con los datos del vehículo que será "brincado", con la intención de que no entre a revisión o le toque semáforo en rojo.
Después, si se pretende llevar a otro estado, se pagan de 100 a 150 dólares a los agentes federales instalados a la salida de Juárez, a la altura de la ermita de San Lorenzo o las exgaritas de la Panamericana, así como a los que vigilan las carreteras al sur del estado.
Todo esto se realiza a través de un "gancho o contacto", que es el encargado de mantener una buena relación y estar en continua comunicación con mandos o jefes de estas dependencias federales, a fin de recabar el dinero y hacer los pagos.
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