El personal de salud que labora en el punto de vacunación del Campus II de la Universidad Autónoma de Chihuahua no cuenta con baños portátiles, en esta ocasión no rentaron, ni tampoco les abrieron los que se encuentran en un edificio aledaño.
Al igual que el personal de salud, los ciudadanos que tienen horas haciendo fila se ven en la necesidad de bajarse e ir hasta el área de Seminarios para hacer de sus necesidades fisiológicas.
Uno de los ciudadanos señaló que acompañó a su papá a la vacuna antes y que se habían dispuesto baños portátiles.
Al personal de salud se les exige estar a tiempo y cumplir con la jornada pero no cuentan con lo mínimo para permanecer en la zona de vacunación.
Incluso hubo personal que marcó a sus delegados sindicales para que pudieran intervenir a su favor.