Con 25 votos a favor de Morena, PT y PVEM y 10 en contra del PAN, PRI y MC, senadores aprobaron en las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos, el dictamen que reforma la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia de Guardia Nacional y que permite dejarla bajo el mando del Ejército Mexicano.
La discusión se prolongó durante varias horas, con el PAN, PRI y MC argumentando en contra de la reforma por los riesgos que, dicen, implica, mientras Morena, PT y PVEM defendían el dictamen para que la Guardia Nacional pase al mando militar.
El dictamen señala que la Guardia Nacional podrá ser objeto de investigación de los delitos que corresponde al Ministerio Público, a las policías y a la Guardia Nacional, en el ámbito de su competencia, las cuales actuarán bajo la conducción y mando de aquel en el ejercicio de esta función.
Además, indica que el Congreso tendrá la facultad para expedir leyes que regulen y establezcan requisitos y límites para la participación del Ejército, Armada y Fuerza Aérea en materia de seguridad interior y en tareas de apoyo a la seguridad pública.
En los artículos transitorios, se da un plazo de 180 días, contados a partir de la entrada en vigor del decreto, para que el Congreso de la Unión armonice el marco jurídico en la materia. Mientras tanto, la organización y funcionamiento de la Guardia Nacional continuará operando con apego a las disposiciones legales vigentes antes de la entrada en vigor del presente decreto.
Asimismo, se asienta que el Senado de la República o en su caso la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, se encargará de ratificar el nombramiento de los jefes superiores de la Guardia Nacional que proponga el presidente de la República.
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La persona titular de la comandancia de la Guardia Nacional debe ostentar el grado de general de División de la Guardia Nacional en activo, y será designada por la persona titular de la Presidencia de la República, a propuesta de la persona titular de la Sedena y mientras no exista personal con formación de Guardia Nacional con la mencionada jerarquía, dicha designación recaerá en un general de División del Ejército, capacitado en materia de seguridad pública.
En los posicionamientos de la oposición el senador del PAN Ricardo Anaya señaló que arranca con Felipe Calderón la militarización y se registran 120 mil homicidios y continúa la militarización con Enrique Peña Nieto y nos vamos al menos 160 mil y se redobla la militarización durante este sexenio y se rebasan los 200 mil homicidios.
En tanto, el senador Marko Cortés secundó lo dicho por su compañero, y señaló que para el PAN la militarización ha venido siendo parte del problema y desde el sexenio antepasado que se tomó la decisión de empezar a sacar a los militares a las calles es cuando inicia la creciente violencia que se refleja en los crecientes homicidios y estos vinieron creciendo.
Sería el primer desplante de crecimiento de homicidios en el sexenio de Calderón, es cierto, pero después incrementaron los homicidios en el sexenio de Peña Nieto, pero ahora en el sexenio de López Obrador está realmente fuera de control con todos los datos oficiales -no estoy hablando de la prensa que ustedes descalifican- estoy hablando de los datos oficiales, son 200 mil homicidios, este se convirtió en el sexenio más violento a partir de qué México lleva registros y por lo tanto no ha sido la solución la militarización.
Luis Donaldo Colosio Riojas, senador de Moviiento Ciudadano refirió que encomendar al ejército tareas y labores para las cuales no está diseñado ni capacitado, van en contra del respeto y la admiración que decimos tenerle al Ejército.
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Advirtió que no tiene nada que hacer en el desvalijamiento de un auto o en una pelea callejera, hacer un lado a los policías locales para recargar toda la responsabilidad de la seguridad pública.
Las fuerzas armadas tienen serias y muy delicadas implicaciones por el simple hecho innegable las fuerzas armadas son letales, están magistralmente entrenadas y capacitadas para disparar matar y abatir a cualquier amenaza.