El “verdugo”, a quien un grupo de policías entregaba a “contrarios” del Cártel de Sinaloa para que los privara de la vida, fue vinculado a proceso por el delito de intento de homicidio, privación de la libertad y robo, luego de que una de sus víctimas sobreviviera al ataque armado y lograra denunciar e identificar a todos los responsables.
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Se trata de Alejandro F.G., a quien en la agrupación criminal apodan el Pariente, que en días pasados fue capturado tras haber sido sorprendido en la colonia Carrizalillo con armas de fuego y droga, además de contar con múltiples carpetas de investigación, por narcomenudeo, homicidio, secuestro, entre otras causas.
La Fiscalía General del Estado lo había señalado como un generador de violencia en la ciudad de Chihuahua, pues desde hace dos años se encontraban en su búsqueda por la privación de la libertad de varios jóvenes y la muerte otros más, a quienes en su mayoría tiraba en la zona conocida como Carrizalillo.
Un juez de Control decidió vincular a proceso al presunto líder criminal, luego de que el Ministerio Público recuperara toda la información correspondiente sobre el intento de homicidio de una persona, quien horas antes había sido detenido por dos agentes municipales, quienes también se encuentran en prisión.
En los antecedentes de los hechos, la Fiscalía General informó que todo ocurrió el pasado 10 de febrero en la colonia Villa Juárez, cerca de las tres de la tarde, cuando los agentes de la Policía Municipal Mauro y Javier, a bordo de la patrulla Nissan Sentra P2136, acudieron a un domicilio en la calle Miguel Trillo y sin motivo aparente entraron para interrogar a un grupo de jóvenes.
En la declaración de cuatro de las víctimas, quienes fueron identificados bajo los seudónimos “Tommy”, “Azul”, “Héctor” y “Demon”, refirieron que ese día los dos agentes ingresaron al domicilio sin motivo aparente, pidieron a los hombres que se hincaran y a las mujeres que se voltearan hacia la pared.
“Se introdujeron sin autorización alguna, sometieron a los hombres, golpearon a algunos de ellos con un bate de beisbol, los esculcaron y les robaron algunas pertenencias, cuando llegó ‘Tommy’ lo obligaron a ingresar a la casa, lo golpearon y le quitaron un maletín con dos mil 800 pesos”, fue parte de la evidencia que declararon los testigos en la carpeta de investigación.
De acuerdo a la Fiscalía General del Estado, el hombre con identidad reservada como “Tommy” fue cuestionado por los agentes municipales sobre su jefe y negó trabajar para alguien más, pero al quitarle el celular se percataron de que se trataba de un distribuidor de droga, así que aceptó que trabajaba para un hombre a quien apodan el Abuelo.
Según los datos reunidos por la Fiscalía General, “Tommy” era vendedor de “cristal” y pidió a los municipales arreglarse con el Abuelo, a lo que se negaron y fue cuando ingresó la persona a quien identificaron como el Pariente, quien dio la orden de llevarse al joven narcomenudista a otro lugar.
Ambos agentes pidieron a “Tommy” que se retiraran y que arreglaran el asunto en el parque El Colibrí, por lo que salieron del domicilio en Villa Juárez, él a bordo de su moto y los agentes en la unidad oficial, que iba escoltándolos hacia el parque a solicitud del Pariente, quien lo había sentenciado a muerte.
Al llegar al lugar, el Pariente y los municipales se encontraron y entregaron a “Tommy”, a quien le dijeron que lo iban "a quebrar", por lo que se bajaron dos sujetos armados de la camioneta del Pariente y se lo llevaron a un taller ubicado en la colonia Praderas del Sur, donde lo interrogaron y ataron de manos.
Luego de varias horas privado de su libertad, decidieron llevarlo a un predio abandonado detrás de Pemex, rumbo a la salida Delicias, donde lo soltaron y le pidieron que corriera, al momento de hacer caso a la instrucción los pistoleros le dispararon en al menos veinte ocasiones, y unos tres impactos dieron en su cuerpo.
Él se tiró al suelo y se hizo el muerto para que los pistoleros lo creyeran así, y cuando se retiraron del lugar, minutos después se levantó malherido y pidió ayuda a unos vecinos, quienes finalmente llamaron a las autoridades y a una ambulancia para que le brindaran los primeros auxilios.
Parte de la información, domicilios y toda la información que dio la víctima llevó a que el pasado miércoles la Fiscalía General del Estado lograra la detención de Alejandro F.G., de 31 años de edad, quien mantenía un amplio vínculo con los agentes municipales para llevar a cabo este tipo de prácticas en la capital.
Juntó a Alejando fue capturado también Daniel Amado C.S., de 21 años de edad; revelaron trabajar para la Gente Nueva en la capital y se les aseguró el día de su captura un arma de fuego marca Llama calibre 45 con 7 cartuchos útiles, un arma de fuego calibre 9mm con 18 cartuchos útiles, una caja de plástico en color verde con gris que contenía dos bolsas de plástico transparente que tenía una sustancia granulada y transparente con las características de la droga “cristal”, con un peso de 38 gramos.