Con tres hijos y uno a punto de nacer “Rosa” salió huyendo de su casa el Guadalupe y Calvo tras sufrir maltrato físico y psicológico de quien era su esposo, “quiero que mis hijos salgan adelante y tengan un mejor futuro”, dijo mientras mostraba los colchones donde duermen y la modesta cocina que tiene en la casa que le prestaron en la colonia Valle Dorado.
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Rosa Soria tiene 34 años de edad y es originaria de Guadalupe y Calvo, actualmente tiene cuatro hijos de 14, 10, 3 y un año de edad y está a punto de dar a luz, llego a esta ciudad hace poco más de tres meses y fue auxiliada por varios familiares pero al ver lo complejo por ser muchos la dejaron a su suerte.
Rosa cuenta que vivía muy feliz con su marido en la sierra pero de un tiempo para acá comenzaron con peleas muy fuertes hasta que se convirtió en maltrato e incluso encontró a su marido con otra mujer.
Esta situación la llevo a huir de su casa pues la violencia contra ella y sus hijos era muy notoria por lo que decidió venir a vivir a la ciudad de chihuahua con la intensión de mejorar su situación económica y ofrecer un mejor futuro para sus hijos.
Al llegar fueron algunos familiares los que la recibieron pero al paso de los días como dicen comenzó a apestar y la dejaron a que buscara su suerte, pasado el tiempo una conocida le ofreció en préstamo su vivienda en la colonia Valle Dorado al sur de la ciudad a cambio de cuidarla.
Hoy la mujer se encuentra desesperada ya que no puede trabajar por su condición de gestación al estar a punto de dar a luz, además de no poder dejar mucho tiempo solos a sus menores hijos.
Al tener unas semanas en la vivienda ubicada en las calles 58 y valle fértil con numeral 5800 una persona le regalo un pequeño refrigerador, y otra unas mesas y estufa que apenas sirve, actualmente duerme en dos colchones usados que le obsequiaron y vive de ayudas de algunos vecinos.
“me preocupa que no tenemos televisión y así como estudiaran mis hijos”, explico rosa un poco triste por su situación, solicitando ayuda al buen corazón de la ciudadanía con ropa, zapatos, algunas bases usadas que aun funcionen, pero sobre todo comida ya que en ocasiones batallan para poder alimentarse.
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