Hilario "N", quien presuntamente asesinó a Alma Lourdes en una carnicería de Ciudad Obregón, Sonora, había acosado previamente a la hermana de la joven, quien trabajaba en el mismo lugar.
"La carpeta de investigación establece que el imputado, previamente, venía sosteniendo una conducta de acoso en perjuicio de Ana Itzel “N”, hermana de la fallecida", detalló la Fiscalía General del Estado (FGE) de Sonora a través de sus redes sociales.
Además, dio a conocer que Hilario "N" fue imputado por los delitos de feminicidio y acoso sexual por la situación que derivó en el asesinato de Alma Lourdes.
Los hechos se registraron el sábado alrededor de las 16:00 horas en un negocio ubicado en esquina de las calles California y Cajeme de la colonia Quinta Díaz en la cabecera municipal de Cajeme.
Las primeras investigaciones indican que este hecho ocurrió probablemente en represalia a una diferencia entre la hoy fallecida y el sujeto, lo que derivó en una riña, por la que el hombre fue expulsado a la fuerza del establecimiento por parte de los empleados.
Sin embargo, momentos después, el hoy detenido arribó de nuevo al inmueble y con un arma presuntamente disparó contra la víctima, quien recibió al menos tres balazos, mismos que le quitaron la vida en el lugar.
Mediante un operativo coordinado entre la Fiscalía General de Justicia del Estado y las instituciones que conforman la Mesa Estatal de Seguridad de Sonora, horas más tarde, pero el mismo día del homicidio, se logró la captura de Hilario “N.”, de 71 años de edad, como principal sospechoso del homicidio de Alma Lourdes “N”.
A través de redes sociales, la hermana de la víctima difundió una carta mediante la cuál aseguró que el sujeto que acabó con la vida de Alma Lourdes había sido denunciado durante la mañana del sábado tras una discusión en el negocio.
“Fue un feminicidio a mano armada de un señor acosador, que por el simple hecho de que le hayan dicho un ‘no’, le hayan establecido límites y exigido respeto a los demás, fue capaz de arrebatarle la vida a una persona inocente, que lo único que hizo fue exigir respeto hacia mi otra hermana (a quien el señor acosaba y acosó durante días en su trabajo). Un señor que no tuvo escrúpulo alguno para quitarle la vida a una mujer trabajadora, honrada, que siempre veía cómo ofrecerle una mejor vida a su hija a diario”, puntualizó en la carta.
Püblicado originalmente en El Sol de Hermosillo